De Gabriel Arauto, a través de Notas Do Alto, adaptación por Jacobo Santín
Un sueño profético es un sueño que trae alguna revelación divina. La revelación puede ser directa, cuando se entrega verbalmente, o indirecta, cuando es transmitida por metáforas.
José, el padre de Jesús, recibió unos sueños proféticos directos. Se le apareció un ángel que le explicó que María estaba embarazada del Espíritu Santo. Después le fue avisado que debía huir a Egipto porque Herodes intentaría matar a Jesús, acto seguido, le fue indicado que debía volver a Israel porque Herodes había muerto. Por último, le aconsejaron que se estableciera en Galilea. En todos esos casos el mensaje fue entregado verbalmente.
La historia de otro José, el hijo de Jacob, está llena de sueños metafóricos. Primero él soñaba que estaba atando gavillas en el campo junto a sus hermanos, cuando de repente su gavilla se levantaba y las de sus hermanos se inclinaban delante de ella. Después él soñó que el sol, la luna, y once estrellabas le hacían una reverencia. Ambos sueños auguraban su gloria futura, pero la revelación fue dada por medio de símbolos. En Egipto José interpretó tres sueños de este tipo.
Cualquier persona puede tener un sueño profético. Este tipo de sueño se llama así por su naturaleza, no por sus destinatarios. Un sueño profético no es un sueño que solo puede recibir un profeta, es un mensaje que contiene revelación divina. Hombres impíos como Faraón o Nabuconodosor tuvieron este tipo de sueños.
Los sueños proféticos son más comunes de lo que la gente piensa, pero no todos los sueños son proféticos. Los sueños pueden ser solamente fruto de nuestra imaginación, del miedo, deseo, de un trauma, o del bagaje que cargamos. Aun así, no es difícil determinar si un sueño es profético o no. Los sueños proféticos directos se distinguen más fácil de los que son producto de nuestra imaginación. Son más vívidos y enriquecedores. Si el mensaje en ellos concuerda con las Escrituras, no hay razón para descartarlos.
Respecto a los sueños indirectos, van a seguir una estructura. Pueden ser misteriosos, pero no serán confusos. Muchas personas piensan que sus sueños irracionales tienen algún significado, pero un sueño metafórico siempre tiene sentido, aunque su significado esté oscurecido. Si el sueño es confusión pura, debe ser producto de la imaginación.
También existe un tercer tipo de sueño profético, que es cuando vives una experiencia futura. A veces la vives en primera persona, a veces en tercera persona. La característica de esos sueños es que te muestran algo que va a suceder, haciendo que veas o estés en aquello que te está mostrando. No hay ni metáforas ni mensajes verbales. Es como viajar en el tiempo o ver una grabación del futuro.
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